La realidad docente—entender las ventajas y carencias

La realidad docente—entender las ventajas y carencias

El 39% de todos los docentes tiene más de 50 años y solo el 17% tiene menos de 34 años.

Expertos e investigadores educativos plantean que la población docente se encuentra en un momento crítico, con inminentes jubilaciones y poca renovación debido a una dificultad para atraer nuevos talentos.

Esto genera preocupación sobre la capacidad del sistema de mantener una fuerza laboral docente adecuada.

Fuente: Centro de Investigación Educativa, CIEDU

Los hallazgos se evidencian en un estudio sobre el personal docente del país, elaborado y publicado por el Centro de Investigación Educativa (CIEDU) en colaboración con investigadores del Centro Internacional de Estudios Políticos y Sociales (CIEPS), la Universidad de Panamá, la Universidad Tecnológica de Panamá y la Universidad Católica Silva Henríquez de Chile. El estudio fue realizado con el apoyo de la SENACYT.

La meta del estudio es entender las realidades de quienes enseñan en Panamá, su nivel educativo, su etnia, las inequidades de género y de edad y la realidad social de los docentes.

Basados en datos del censo llevado a cabo en 2023, el estudio fue presentado en un evento en la Ciudad del Saber el pasado martes, 15 de octubre. Se analizaron datos del censo y se evaluó las realidad socio-demográfica de la población docente.


Género

El estudio revela que el 74% de los docentes censados son mujeres.

La proporción de hombres y mujeres disminuye a medida que se va subiendo de nivel educativo. Por ejemplo, en preescolar, casi todas, un 98%, son mujeres, mientras que en secundaria, el porcentaje de mujeres, si bien mantiene la mayoría, disminuye a 63%.

Al tratar con niños pequeños en edad de preescolar o primaria, principalmente son docentes mujeres las encargadas de esas etapas de enseñanza. En primaria, la proporción de mujeres y hombres docentes es de 78% a 22%.

La tendencia hacia docentes mujeres también es clara cuando se habla de la población encargada de necesidades educativas especiales (NEE). El 88% de los docentes que enseñan NEE son mujeres.

Fuente: Centro de Investigación Educativa, CIEDU

Sobre la sobre-representación de mujeres en preescolar, en el estudio se plantea que “la creencia de que el instinto maternal es suficiente para enseñar desvaloriza la complejidad y las competencias necesarias para ofrecer una educación de calidad”.

En su análisis, CIEDU argumenta que no solo las mujeres eligen carreras educativas en mayor proporción, sino que también hay dinámicas sociales, culturales y económicas que hacen considerar las carreras educativas como más apropiadas para mujeres.

Durante la discusión del estudio, se exploró la feminización de la docencia y el concepto de enseñar como una extensión de la maternidad, dos actitudes que impactan la diversidad a la que están —o no— expuestos los estudiantes en sus primeros años de enseñanza.


Vacío

En ediciones anteriores de El Pulso hemos explorado la escasez de la cobertura educativa a nivel preescolar y la falta de docentes.

El análisis llevado a cabo en el estudio refuerza estas estadísticas. Esto, además, sucede en preescolar y en NEE.

Según los datos publicados, en 2023 había 3,383 docentes de preescolar para 3,005 centros educativos a nivel nacional.

Estudios publicados anteriormente estiman que alrededor de un 30% de los niños y niñas en edad preescolar no están matriculados.

Basándonos en datos correspondientes al 2022, publicados por el propio ministerio de Educación, en las aulas de preescolar hay una proporción de 20 estudiantes por docente. Esto, tomando en cuenta que la cifra de docentes para ese nivel que registra el Meduca es mayor a la arrojada por el censo, siendo esta última la cifra utilizada en el estudio de CIEDU.

Durante la discusión posterior al estudio, los investigadores fueron enfáticos. “Si queremos aumentar la cobertura en preescolar, vamos a necesitar más docentes preescolares”, dijo Mariana León, una de las investigadoras de CIEDU.

A nivel de docentes encargados de NEE, la proporción es bajísima. Estos corresponden a sólo el 2.5% de todos los docentes censados.

La proporción de educadores a estudiantes se estima en 650 estudiantes por cada educador de necesidades especiales. Hay que tomar en cuenta de que de estos 650 estudiantes, no todos necesitan atención especial.


Diversidad

Otro dato interesante que arroja el estudio es la diversidad ética de los docentes. Por ejemplo, solo el 10% de los docentes son indígenas, mientras que el 16% de la población lo es. En contraste, el 37% de los docentes son afrodescendientes, un porcentaje mayor al total poblacional de 29%.

En el caso de la población indígena, si bien muchos factores pueden influir, el limitado acceso a educación superior y carreras universitarias podría impactar esta cifra. Datos publicados en el estudio evidencian que más del 86% de los docentes cuentan con un título universitario.

Por otro lado, la discrepancia entre la representación afrodescendiente en la población docente y en la población general podría tener otras causales.

Una que sugiere el estudio es la falta de oportunidad en otras áreas, sugiriendo que la educación puede ser un campo donde históricamente se han encontrado mayores oportunidades de empleo para esta población.

La composición sociodemográfica del cuerpo docente del país, analizada y expuesta en este estudio, ayuda no solo a entender quiénes son los docentes sino también las limitaciones de accesibilidad y permanencia en el sistema educativo para quienes enseñan.


Salarios

El 57% de los docentes reportan ganar entre $1,000 y $2,000 al mes. Solo un 16% reporta ganar más de $2,000 mensuales. Mientras tanto, el 27% devenga menos de $1,000 mensuales.

Si bien, en comparación a la media nacional, los salarios docentes son algo competitivos, hay disparidades en los salarios devengados y estos no siempre permiten la estabilidad. Por ejemplo, un 8% gana $500 o menos mensuales.

Las diferencias de salarios son claras de nivel a nivel, los niveles de secundaria y de NEE siendo los mejores pagados. Por ejemplo, el 57% de las maestras de preescolar gana menos de $1,000 mensuales y solo el 5% gana más de $2,000.

En cambio, a nivel de secundaria, por ejemplo, el 23% está por debajo de los $1,000 y el 21% por encima de los $2,000.

Si bien estas diferencias son intuitivas, pues parece haber mejores salarios para los docentes encargados de áreas más especializadas, sin duda parte de la población docente es vulnerable económicamente. Aún más si se toma en cuenta el porcentaje de docentes que son jefes de hogar.


Bienestar

Finalmente, el estudio elabora conclusiones en base al Índice de Acceso a Bienes, elaborado para la investigación. Muchos docentes tienen un buen acceso a bienes esenciales pero igual existen desigualdades. Basado en los datos censados en 2023, se evalúa cuántos docentes tienen acceso a bienes como automóvil, estufa, computadora, laptop, internet y aire acondicionado, entre otros. En total, el índice evaluó el acceso a 12 bienes materiales.

De momento, el CIEDU no ha publicado la comparación de los resultados de la población docente con la población en general. Sin embargo, lo estudiado revela interesantes realidades.

Un 37% de los docentes tiene un nivel de bienestar material medio o bajo. Con un 7% en el nivel bajo. Ese 7% solo registra tener entre 1-6 de los bienes encuestados. El nivel medio va de 7-9 bienes.

El 64% restante cuenta con un bienestar material alto, reportando más de 10 de los 12 bienes materiales encuestados. Por ejemplo, el 68% de los docentes dijo tener un automóvil en su hogar y el 45% dijo tener aire acondicionado. Estos índices son ambos más altos para docentes que para la población general.

Cuando se publicaron datos preliminares del Censo, el Instituto Nacional de Estadística y Censo reveló que el 45% de los hogares tenían un automóvil y el 35%, aire acondicionado.

Recomendaciones

Para cerrar, los investigadores hacen recomendaciones en base a los resultados arrojados y analizados en el estudio. Por ejemplo, plantean implementar un plan integral de relevo generacional que pueda cerrar la brecha entre una población docente veterana y a su vez atraer a personas jóvenes.

Se enfocan también en la importancia de generar bienestar financiero, planteando la posibilidad de implementar capacitaciones sobre finanzas personales para docentes. Sobre el tema de género y diversidad, plantean fomentar la inclusión de mujeres en puestos de liderazgo y promover la equidad étnica a todos los niveles educativos.

En cuanto a la necesidad de docentes para preescolar, sus recomendaciones para incrementar la cobertura de ese nivel en el país incluyen un plan nacional de formación y una mejora en la oferta en áreas rurales e indígenas.

Finalmente, sobre la formación docente, exponen la necesidad de programas acelerados y avanzados para docentes donde puedan seguir formando competencias dentro del propio sistema, para así especializar y seguir cumpliendo con su rol de enseñanza.


Insumos

Investigaciones como la del CIEDU son extremadamente valiosas para avanzar con el estudio del sistema educativo en el país y la realidad de la población docente.

Entender la realidad social y económica de quienes enseñan podría dar pié a implementar cambios positivos en el bienestar docente y la estabilidad profesional.

Durante la discusión posterior al estudio, surgieron diversas preguntas a futuro sobre los resultados del análisis. Cuestiones sobre la realidad profesional de los maestros, la estabilidad laboral dentro del sistema oficial y la capacidad de permanencia en el sistema para docentes egresados de carreras especializadas son todos temas a explorar a futuro.

El estudio, sin duda, presenta una base sumamente valiosa para analizar aún más a fondo la realidad social y profesional de los docentes panameños.